Patricia era una profesional que ocupaba una posición en tesorería en una institución pública, estaba cómoda trabajando allí. Su trabajo lo conocía “casi de memoria”; cumplía con su horario de trabajo y se llevaba bien con todos. Lo único que no le satisfacía era que su sueldo no le alcanzaba para conseguir todo lo que quería. Cuando le ofrecieron otro empleo, no se animó, aunque la paga era superior, pensó, que corría mucho riesgo, dado que era nombrada y por lo tanto, se sentía segura en su actual puesto.
En otra oportunidad, se animó a postular a una vacante, pero no quedó entre los candidatos aptos. El problema de Patricia era que no quería actualizarse, no quería sacrificar su tiempo libre en estudiar nuevas cosas y prefería mantenerse en su zona de confort. Patricia se olvidó que estamos en una época donde es importante y necesario mantenerse actualizado. El éxito no depende si tienes títulos, depende que mantengas vigencia, sin embargo, ante la pregunta inicial: el ser humano no es alguien porque estudia, es alguien desde que nace.
“La naturaleza del conocimiento es cambiar rápidamente y las certidumbres de hoy siempre se convierten en los absurdos del mañana”
Peter Drucker